Pocas cosas hay tan placenteras como tener impoluto el coche. Pero no siempre es fácil: las condiciones climáticas externas, la entrada y salida de pasajeros y el desgaste hacen que mantener limpio el coche no sea siempre fácil.
Por eso, recopilamos 10 consejos para que tu automóvil brille con luz propia y esté siempre radiante. Como en cualquier asunto, si quieres hacerlo bien tienes que seguir unas instrucciones, y la limpieza del coche no va a ser menos. ¡Vamos allá!
- Utilizar productos de limpieza poco concentrados: cuanto menos concentrados estén, mucho mejor, ya que resultan más efectivos a la hora de limpiar el coche.
- Evitar productos perfumados, porque acostumbran a ser fabricados con sustancias químicas alergénicas. Las marcas más conocidas y con más publicidad no son las únicas que funcionan bien para limpiar tu coche.
- Asegúrate de limpiar bien los bajos del coche, ya que pueden acumular el salitre de la carretera.
- Vigila no acercar demasiado la manguera a la carrocería, porque pueden dañar la pintura.
- Para limpiar el interior de un coche, asegúrate de sacar todos los objetos del interior antes de pasar el aspirador. Si limpias el habitáculo del vehículo, empieza limpiando las plazas traseras (la bandeja portaobjetos, los asientos, etc).
- No olvides limpiar las bolsas de los asientos y, si puedes, introduce el aspirador por dentro de todas las ranuras y pliegues del coche.
- Es recomendable pasar el aspirador por los surcos del borde del maletero, ya que esta zona suele acumular hojas. Tras limpiar a fondo las gomas del marco del maletero, es aconsejable que apliques un producto protector y engrases en las bisagras.
- Para un resultado más profesional en el interior, utiliza una máquina de inyección-presión que podrá extraer el polvo hundido en las zonas más profundas e inaccesibles de la tapicería.
- Es importante limpiar las llantas para eliminar toda la carbonilla que desprenden los frenos. Para tal fin, es recomendable aplicar primero un producto específico de limpiallantas y después recurrir a un sellador.
- La limpieza de las lunas es imprescindible para tener la mejor visibilidad posible. Para la parte exterior puedes utilizar limpiacristales, pero para el interior es mejor usar un producto específico y asegurarte que está limpio. Lo mejor es pasar primero un paño y luego secar con papel para eliminar por completo toda la humedad. Así, evitarás los siempre molestos deslumbramientos y reflejos.
Y ahora que ya sabes cómo limpiar tu coche y mantenerlo limpio, ¿Qué tal si revisas el estado de las luces del vehículo? Todo cuidado es poco para disfrutar de tu Mercedes como si fuese el primer día.